Next Landmark 2020 el ganador es Planetary Garden de Bruna Sigillo

El jardín del parvulario “Casa Coccapani”, en Fiorano Modenese (MO), podría convertirse en un "jardín planetario" para la arquitecta Bruna Sigillo, ganadora del Next Landmark 2020. El jurado, formado por Mario Cucinella (MCA ARCHITECTS / School of Sustainability), Massimo Imparato (SOS - School of Sustainability), Don Antonio Lumare, párroco de Fiorano Modenese (presidente de la Fondazione Coccapani), Francesco Tosi, alcalde de Fiorano Modenese, Federica Minozzi (Fondazione Iris Ceramica Group) y Paolo Schianchi (arquitecto y profesor de IUSVE), ha decidido otorgar la beca de estudio para la participación en el Master in Sustainable Design de SOS - School of Sustainability, el viaje de ida hasta la ciudad de Bolonia, donde está la SOS - School of Sustainability, la difusión en línea del proyecto en todos los medios de comunicación del grupo y el diploma de ganador del “NEXTLANDMARK INTERNATIONAL CONTEST 2020” a esta arquitecta.
El jurado ha concedido, además, tres menciones especiales a Alberto Ferrara por "Back to the Roots", Nina Gogina por "Educational Garden" y Carolina Pelosato por "Treasure Island".
   En su novena edición, el concurso internacional para arquitectos y diseñadores organizado por la Fondazione Iris Ceramica Group y Floornature eligió la forma de "concurso de ideas", con procedimiento abierto y de forma anónima e individual, reservándolo a los jóvenes arquitectos y creativos de las disciplinas de la arquitectura y el diseño licenciados del año 2010 en adelante. Se pidió a los concursantes que elaboraran una propuesta para las nuevas áreas exteriores del parvulario “Casa Coccapani”, en Fiorano Modenese (MO), teniendo a su disposición el informe sobre el estado en que se encontraba el sitio objeto del concurso, documentación fotográfica y en vídeo y un presupuesto. La realización de las obras no podía superar el límite hipotético de 40.000 €. La escuela Coccapani fue objeto de una intervención de adecuación sísmica y de una reciente rehabilitación, pero no se había hecho un rediseño y una valorización de las áreas exteriores. El concurso de ideas invitaba a transformar un espacio carente de valor en un “jardín educativo”, pero sin modificaciones sustanciales de la distribución de los espacios para vehículos y conservando los árboles existentes.

Indicaciones que han sido atendidas en el proyecto “ Planetary Garden” de la arquitecta Bruna Sigillo, que, con una intervención ligera, ha respetado las estructuras y árboles existentes, introduciendo nuevos valores y posibles funciones a través de pocos y estudiados elementos. Desde la introducción de arbustos perfumados y con flores que aportan color y subrayan la entrada, donde se acoge a niños y padres, a la ordenación del límite hacia la ciudad para realizar una fachada verde que se convierta en el nuevo borde urbano. Desde la creación de un aula al aire libre, aprovechando el único muro que hace de valla y, como tejado, las copas de los árboles, a la introducción de equipamientos de apoyo a la enseñanza que respondan a los cinco campos de experiencia. Y desde la idea de un parterre que se convierte en un área de juegos, mediante un elemento de color situado en la calle de acceso que crea un hilo conductor para los recorridos interiores y un juego-guía que facilita el acceso a las personas con discapacidades. Hasta la realización de un gran anillo interactivo que circunscribe partes del jardín, convirtiéndose, según las necesidades, en un asiento, una encimera, un límite de protección o el umbral de acceso a un mundo imaginario. El jardín pensado por la arquitecta Bruna Sigillo, además de ser pedagógico y ecológico, es también colectivo y productivo. La arquitecta sugiere que la misma realización del jardín pueda hacerse a través de diferentes grados de intervención, con una parte soft, representada por la plantación de arbustos y flores, que puede convertirse en un importante momento para la colectividad, al igual que el cuidado subsiguiente de los espacios. La productividad, en cambio, está ligada a la presencia de especies vegetales dedicadas a usos alimentarios, aromáticos o estéticos, así como a la creación de un semillero y un vivero para plantas, que podrían ser cuidados por los niños, donando los productos obtenidos a otros jardines de la ciudad. Así, el Planetary Garden, proyectado por la arquitecta Bruna Sigillo, no solo recupera y valoriza lo existente, sino que va más allá de las fronteras físicas del jardín para plantear una idea simple a la vez que rompedora: la de una escuela que se convierte en un “vivero” para la ciudad, un vivero humano y vegetal, en que aprender a ser “jardineros planetarios” en la acepción del biólogo y paisajista francés Gilles Clément.

(Agnese Bifulco)

Project Name: Planetary Garden
Architect: Bruna Sigillo
Images: Bruna Sigillo

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