Reforma del Estadio Khalifa para el mundial de fútbol FIFA 2022 en Doha

El estadio Khalifa de Doha, erigido en 1976, había sido reformado varias veces antes de que Qatar recibiera la feliz noticia de que se convertiría en sede del mundial de fútbol FIFA en 2022. Nada más saberlo los organizadores convocaron a la empresa Maffeis engineering de Vicenza, que cuenta con una importante experiencia en grandes construcciones. El estadio existente se había construido en la época del hormigón armado y en su lado occidental tenía una cubierta formada por una sola arcada. Para la renovación actual la empresa Maffeis ha revisitado completamente dicha arcada, introduciendo otra simétrica en el lado oriental pero conservando las características originales. El nuevo trazado tiene una curvatura que varía entre 130 y 160 m de radio, con un desarrollo aproximado de unos 250 m, y se ha transformado en un doble arco separado por teleras tubulares, compuestas por dos tubos huecos circulares de 1.100mm soldados juntos. Al abordar una renovación de este tipo los mayores problemas se referían a la interacción entre las estructuras existentes y el volumen del nuevo arco doble, y a esto se unía la acción de las cargas de las nuevas estructuras sobre las antiguas, por lo que era prioritario buscar un sistema estático compatible con el existente. El problema se resolvió construyendo cinco torres provisorias para colocar el nuevo arco a la vez que se reconstruía el antiguo. Se fueron eliminando progresivamente los sillares que se iban sustituyendo con los nuevos, de mejores prestaciones gracias a su refuerzo estático. Entonces se procedió a depositar los arcos nuevos, retirando las torres de soporte para hacer coincidir las geometrías existentes (de los soportes del estadio) con las teóricas (del nuevo arco). La última operación realizada fue la instalación de los cables de acero de la cubierta cuya sección se puede considerar relativamente mínima: 20-50mm para los frontales y 70mm para los que tensan el anillo de cierre del manto. Esta red de cables, que se suele ver a menudo en los estadios modernos, sujeta la cubierta realizada en PTFE y ETFE, instalada con una grúa Big Lift y que se convertirá en uno de los rasgos más icónicos de todo el estadio.

Fabrizio Orsini

Architect: Maffeis Engineering spa
Client: MIDMAC-PORR- SIX CONSTRUCT JV
Final client: ASPIRE ZONE
General contractor: SIX CO & Midmac
Steel contractor: Eversendai
Membrane contractor: Taiyo Middle East
Cables contractor: Pfeifer
Architect Consultants:Dar Al - Handasah
Materials: Cables| ETFE | PTFE | Steel
Total surface: 44000 sq. m
Span: 280 m
Seats: 40.000
Height: 98 m
Weight: 4.000 tons