27-05-2020

Lake House de Solo Arquitetos

Solo Arquitectos,

Eduardo Macarios,

Alvorada do Sul, Brasil,

Ville,

Solo Arquitetos ha realizado en Alvorada do Sul, Brasil, una espléndida casa de vacaciones inmersa en plena naturaleza y concretamente junto al río Paranapanema. La vivienda, una villa independiente con piscina, está compuesta por dos bloques distintos: uno para los momentos de socialización y el otro dedicado a las zonas privadas. Los clientes que encargaron el trabajo, una pareja sobre los 50 años, para crear la estructura perimetral de la casa decidió reutilizar los ladrillos que antes formaban las paredes de su empresa, símbolo de su trabajo, y que ahora usarán para relajarse.



Lake House de Solo Arquitetos

Entre los proyectos realizados por los brasileños Solo Arquitetos figura una pequeña casa independiente con un buen equilibrio y atractivo rural, inmersa en plena naturaleza. Se llama Lake House y está ubicada en Alvorada do Sul, en la demarcación entre el distrito de Sao Paulo y el de Paraná, en la trayectoria del gran río Paranapanema que en este tramo se despliega en una serie de anchas ramificaciones, adquiriendo precisamente la forma más de lago o de laguna que de río.

La parcela que ocupa la casa tiene forma rectangular alargada y una ligera inclinación desde la entrada hasta el final de la finca donde desciende de forma natural hacia el río. Estructuralmente la residencia se distribuye en dos bloques también rectangulares que recuerdan la forma del terreno, dispuestos en paralelo y escalonados tanto en longitud como en altura, para acentuar el dinamismo y la sensación de independencia de ambos sectores. Los bloques reflejan la división en el uso al que están destinados: una zona para socializar y otra para los momentos privados, o más sencillamente, una zona para la noche y otra para el día. Las dos mitades están unidas por una pasarela realzada en madera y cubierta con amplias cristaleras.

El proyecto sigue la inclinación natural del terreno, motivo por el que las excavaciones de los cimientos, de hormigón armado, se limitaron al máximo. De las excavaciones se extrajeron un gran número de rocas naranjas y rojizas, colores cálidos típicos de estas tierras. Se trata de un material de construcción muy válido, tanto desde el punto de vista económico como desde el estético. Así que esas piedras se reutilizaron in situ para erigir la parte de muros perimetrales que rodean el "volumen privado", donde hay dos dormitorios de invitados y una enorme y airosa habitación principal que ocupa la mitad de la planta. Esta, según los arquitectos, es una auténtica recompensa que los clientes se han merecido tras años de duro trabajo. Algo que hace que este dormitorio sea especial es que, gracias a la inclinación de la parcela, se ha podido crear un voladizo elevado respecto al terreno, un balcón sin barandilla, un belvedere, desde el que se pueden contemplar la piscina, el jardín y más adelante las lagunas fluviales del Paranapanema. Una cristalera corredera dividida en cuatro secciones que ocupa toda la pared permite configurar el espacio como si se estuviera al aire libre, en base a las estaciones y al clima.

El segundo volumen que forma la construcción de la Lake House de Solo Arquitetos está dedicado a la socialización, ya que se considera como una especie de núcleo central que establece la conexión entre los dormitorios y la piscina. Aquí el espacio es único, grande y diáfano, pensado específicamente para que la vista no encuentre obstáculos en la contemplación del río. Incluye el salón, la cocina y el comedor. Más allá de una cristalera que delimita los interiores, el bloque continúa, convirtiéndose en una amplia veranda elevada de madera. El techo de una sola agua está estudiado para optimizar la entrada de la luz durante el día, mientras que todo está decorado con muebles de madera maciza, como la gran mesa o los elegantes sillones. Los suelos son de hormigón pulido que crea una textura grunge e jaspeada, mientras que las paredes, el detalle que convierte el proyecto en algo auténticamente único, están totalmente realizadas con ladrillos rojos vista. No son cualquier tipo de ladrillos, ya que son los mismos que durante décadas formaron parte de la construcción de la pequeña fábrica que tenían los clientes. Con un gesto altamente simbólico, ecologista y romántico la pareja decidió desmontar y conservar las paredes que fueron testigo de su trabajo y sus sacrificios, para volverlas a montar en el lugar que a partir de ahora representará para ellos ocio y descanso, y dentro de unos años, el retiro en su jubilación.

Los arquitectos cuentan:"las piedras que rodean el volumen privado se extrajeron del terreno, mientras que los ladrillos usados para el volumen de socialización provienen de la antigua fábrica de los dueños – lo que antes protegía su trabajo, ahora les alberga en sus vacaciones. Por eso la construcción resulta estrechamente vinculada tanto con el lugar en el que surge como con los propietarios". Este proceso de reutilización se conoce con el término inglés upcycling, es decir el reciclaje de un material de desecho sin necesidad de transformaciones intermedias. La idea de evitar gastos y derroches inútiles se ha respetado en toda la técnica de construcción, que en Brasil emplea los métodos más sencillos y tradicionales: cimientos de hormigón, paredes de ladrillo y estructura de madera para sostener el tejado.

Francesco Cibati

Location: Alvorada do Sul, Brasil
Site size: 3000 m2
Project size: 250 m2
Project: Solo Arquitetos
Project Team: Arthur Brizola, Franco Faust, Gabriel Schneider, João Gabriel Küster Cordeiro, Lucas Aguillera, Thiago Augustus, Victor Vilela
Completion date: 2018
Photographer: Eduardo Macarios


×
×

Manténgase en contacto con los protagonistas de la arquitectura, Suscríbase al boletín de Floornature