10-05-2019

juri troy architects: nueva vivienda en una streckhof austriaca

juri troy architects,

Juri Troy,

Weingraben, Austria,

Housing,

Con la intención de conservar la streckhof de familia en el pueblecito de Weingraben, en Austria, los clientes le pidieron al estudio juri troy architects que proyectara una nueva casa que se inspirara y completara el edificio tradicional junto al que se ha emplazado. El antiguo pajar se ha restaurado y destinado a destilería.



juri troy architects: nueva vivienda en una streckhof austriaca

Situada en la diminuta localidad austriaca de Weingraben, del distrito de Oberpullendorf, en el estado de Burgenland, la nueva vivienda de la familia vienesa Schneider forma parte de una “streckhof”. En septiembre de 2015 juri troy architects empezó a trabajar en lo que es una típica masería austriaca que la familia había heredado de una abuela, con el deseo de mantener lo más posible de la construcción original, por la historia que contenía.
Con poco más de 300 habitantes el pueblecito de Weingraben, en la zona sureste de Austria sigue conservando hoy en día numerosos ejemplos de streckhof que dan a la calle principal con una fachada estrecha que se extienden hacia el interior una junto a la siguiente en medio de los campos cultivados con frutales. A lo largo de la Hauptstraβe, que lleva hacia el centro del pueblo en una trayectoria de sur a este, se encuentra también la streckhof de los Schneider. La vivienda se distribuye en varios cuerpos uno junto al otro, que antaño se dedicaban a almacén, pajar o establo y que hoy siguen conservando su aspecto tradicional, con espesos muros de ladrillos con revoque, cerramientos de madera y un tejado de dos aguas pronunciado. Dichos volúmenes se ocultan tras los edificios principales que dan a la calle, y en base a sus funciones, siguen ilustrando historias sobre cómo se vivía y se cultivaban las tierras hace más de un siglo. Los clientes querían salvar la construcción original y restaurarla en una nueva vivienda pero el estudio de Juri Troy consideró que no era posible dicha reforma, por lo que se prefirió construir una nueva casa junto al volumen del antiguo pajar y destinar este último a destilería, con lo que se perpetúa otra tradición local muy difundida.
La nueva casa se ha emplazado más allá del pajar, con lo que se crea otro patio, que es el típico elemento que reúne los distintos edificios de los conjuntos rurales. Adaptándose a este esquema, la casa se sitúa a la misma escala, y es solamente un poco más alta, para hacer resaltar la relación jerárquica entre las dos construcciones. Los principios por los que se rige el nuevo edificio son los mismos que el existente, y que los otros edificios agrícolas: los materiales, la estructura, los acabados, la decoración y distribución del mobiliario. La mayor dificultad, como admitió el propio arquitecto, consistió en mantener un equilibrio y una armonía con el contexto, y proyectar un edificio que encajara en él perfectamente desde el principio, sin resultar en contraste con la materia plasmada por el tiempo y la intemperie de tantos años que se mantenía en buen estado. Los proyectistas incluso se preocuparon de buscar artesanos y albañiles que conocieran las técnicas de construcción tradicionales del lugar para asegurarse de que el vínculo con el pasado no se interrumpiera.
Por otro lado, a la primera observación la casa en muchos aspectos resulta distinta del pajar restaurado. En primer lugar, los lados largos de la construcción han pasado a ser las fachadas principales, eliminando lo que antaño eran los cerramientos de madera y que ahora se han transformado en grandes portales. Las cristaleras retroceden respecto al perímetro exterior del edificio creando umbrales-terrazas de 50 centímetros, la misma medida que el espesor de los muros, dos en cada planta. Atravesando el eje longitudinal de la casa, reducen el espacio interior de la planta baja, haciéndolos parecer un corredor que comunica las dos partes exteriores, un pasadizo entre los dos patios. Gracias a las grandes cristaleras correderas la zona de día forma un único espacio con el jardín. Gracias a ello estando dentro se disfruta de la agradable sensación de estar prácticamente al aire libre, pero además contribuye a crear una ventilación natural durante los meses de verano. En cambio, cuando se cierran completamente, las contraventanas de fabricación artesanal en madera de abeto representan la idea de cerramiento típico de los pajares antiguos, y además evitan la dispersión de calor.
En la estructura de ladrillo se introduce un bloque de madera que de acuerdo con la construcción tradicional incluye todo el mobiliario de la planta baja, por un lado la cocina y por el otro el salón, en ambos casos integrando en las paredes tanto espacios contenedores como los complementos prácticos. En el centro se sitúa el bloque de la escalera bordeado por un elemento bajo y plano que actúa como panca para la mesa de la cocina y como estantería para libros en el salón.
La planta de arriba, el desván y las paredes divisorias son de madera de abeto maciza. Al subir la escalera se encuentra un espacio donde se ha instalado la biblioteca y un rincón de estudio desde el que se accede a los dormitorios a los lados. Es digna de mención la altura de dicho espacio, que se extiende hasta el tímpano, donde llega a medir 7 metros. Una escalerilla conduce al desván situado sobre los dos dormitorios de los niños, con servicio y zona de almacenaje, más un espacio central dedicado a la práctica del yoga y desde el que se disfruta de una vista maravillosa.
Como valor añadido los clientes querían que este edificio tuviera un bajo impacto medioambiental: el grueso espesor de las paredes no ha necesitado más aislamiento, y no se han utilizado revoques de caucho de silicona, sino que sobre los muros se han aplicado únicamente revoques de cal. En los suelos se ha aplicado una capa de dos a tres milímetros de caseína de arcilla, recuperando una técnica tradicional.

Mara Corradi

Architects: juri troy architects
Client: Familie Schneider, Wien
Location: Weingraben, Austria
Gross useable floor space: 137 sqm
Lot size: 2356 sqm
Completion of work: 8/2018
Distillery: 20 sqm
Built-up area: 95 sqm
Start of planning: 9/2015
Start of construction: 4/2017
Completion: 8/2018
Planning: juri troy architects
Project management: Georg Marterer (Local construction management)
Assistance: Timea Kos, Angelo Ferrara
Structural consultant: Höhenberger Engineering-ZT-GmbH
Roof: Holzbau KAST GmbH, Gols; Rathmanner GmbH, Neutal
Masonry: Baumeister Pfnier & Co GmbH, Oberpullendorf
Photographs: © Juri Troy

www.juritroy.at


×
×

Manténgase en contacto con los protagonistas de la arquitectura, Suscríbase al boletín de Floornature