04-03-2022

Atelier 111: casa Kozina, Trhové Sviny, República Checa

Atelier 111 architekti,

Alex Shoots Buildings,

República Checa,

Ville,

Casa Kozina en Trhové Sviny, en la República Checa, es la vivienda de Jiří Weinzettl y Barbora Weinzettlová realizada por Atelier 111 architekti. En el casco histórico de la localidad, dos volúmenes separados por un patio consituyen un solo núcleo residencial, resultado de una cuidadosa operación de rehabilitación de los detalles originales.



Atelier 111: casa Kozina, Trhové Sviny, República Checa

Los arquitectos Jiří Weinzettl, el fundador de Atelier 111, y Barbora Weinzettlová, miembro histórico del estudio, deciden comprar dos edificios situados uno frente a otro en un patio del centro histórico de Trhové Sviny, y restaurarlos en un solo núcleo residencial que ahora se llama casa Kozina. La localidad en la que está ubicada tiene unos 5.000 habitantes y se encuentra en la Bohemia meridional, en la República Checa, a un par de horas en coche de Praga, donde los proyectistas tienen la sede de su taller. Por eso, no se trata de la elección de la primera casa, sino de una casa que definen como “una alternativa a las casas suburbanas que a menudo se ven recortadas en el paisaje de forma desproporcionada”.
Trhové Sviny fue fundada en época medieval y conserva pocos restos arquitectónicos históricos porque la localidad sufrió en varias ocasiones incendios devastadores, por lo que casi toda está reconstruida. Pero se mantiene un núcleo del siglo XIX alrededor de plaza Kozina, donde antaño surgía el castillo que dio origen al primer asentamiento urbano. Actualmente la fortificación desaparecida ha sido sustituida por un área verde alrededor de la que transcurre la carretera principal de la ciudad, en la que se encuentran tiendas, cines y colegios.
Precisamente aquí se encuentran las dos parcelas que Jiří Weinzettl y Barbora Weinzettlová encontraron, donde la villa tiene un entramado más espeso y donde se conservan los pocos rasgos antiguos que han sobrevivido, aunque también incluyen algunas pequeñas zonas de cesped que siguen demostrando el carácter rural del asentamiento. Los arquitectos percibieron el potencial de los edificios que daban a dos calles distintas pero que se comunicaban por un patio, y quisieron transformarlos en una sola vivienda. El trazado circular de la planimetria impulsaba a crear un centro en el centro, un espacio protegido que pudiera dar la sensación de estar aislado del ruido del tráfico a pocos metros.
Algunas de las estructuras originales se encontraban en un estado de ruina, mientras otras habían sido sometidas a una reforma brutal hace unos 20 años, pero con todo se pudo identificar algunos rasgos distintivos. Entre ellos, los muros de piedra ocultos tras revestimientos de ladrillo y los portales de piedra o de ladrillo con arco rebajado, que se distinguen por una sobria belleza. Por lo tanto se decidió quitar los revestimientos superficiales y los revoques estropeados, y eliminar los elementos innecesarios, como el balcón con barandilla que imitaba el “estilo alpino” y la ventana del desván con marco de material plástico.
La escala arquitectónica y los tamaños originales se han respetado y valorizado como conjunto, realizando un armonioso alternarse de vacíos y llenos. Las fachadas y la articulación de los espacios interiores demuestran un desarrollo arquitectónico que se hizo por etapas y debido a exigencias posteriores, pero que hoy se reúne en una unión superior. El empleo del revoque blanco para rematar todos los laterales no impide valorizar las distintas tramas estructurales, de piedra en la base y de ladrillo en lo más alto. Las inclinaciones de aguas se han respetado y las cubiertas han sido restauradas con las apreciadas tejas cola de castor.
El tema de las ventanas presenta un léxico múltiple que hace resaltar las distintas épocas en que se hicieron las varias obras.
Las aberturas históricas se restauraron siguiendo el tamaño y las formas originales, con marcos con montantes y traveseros. Las aberturas que ya no son funcionales se cerraron, mientras que las nuevas vistas se han realizado con un tamaño mayor, trazando cristaleras en paredes enteras.
Desde el punto de vista de la planta, el volumen norte contiene el garaje, con dos entradas como en origen, mientras que el volumen sur, con acceso peatonal principal hacia la plaza, está dedicado a la vivienda en sí. El patio central actúa como enlace entre ambos. Las nuevas cristaleras miran en esta dirección, abriendo los espacios interiores a la vista de la vegetación del jardín con árboles frutales, mientras que el gran ventanal del tímpano enmarca el campanario de la iglesia gótica cercana.

A diferencia de los otros volúmenes que se caracterizan por una sola planta, la casa tiene también una planta abuhardillada que está reservada totalmente a los niños. La planta baja está repartida entre las zonas comunes y la zona del dormitorio matrimonial.
Los interiores se transformaron de forma radical. Se tiraron varios tabiques para realizar un gran salón con cocina, que continúa a otro segundo patio pavimentado en madera. Desde aquí la mirada llega, pasando por el salón, hasta la calle principal. El suelo de listones de roble y la pared en bruto que se extiende entre exterior e interior, añaden otros elementos de continuidad. Pero sin duda el techo abovedado realizado con tablones de abeto es el elemento que completa el conjunto y garantiza el toque más escenográfico.
Todos los espacios han sido reinventados con mobiliario a medida en función de las exigencias de una familia. La calidez doméstica de la madera se combina con la modernidad del acero, que se atenúa con los tonos de blanco, y del hormigón pulido. El hueco de la escalera para subir a la planta de arriba se derribó y se sustituyó por un gran espacio acristalado y luminoso, donde la escalera se convierte en elemento decorativo, como los armarios empotrados y las librerías. La planta abuhardillada, totalmente revestida con madera de abeto, es el refugio de los pequeños, con un amplio espacio para juegos y lecturas, habitaciones individuales y puntos de observación privilegiados al jardín y a la ciudad.

Mara Corradi

Architects: Atelier 111 architekti www.atelier111.cz
Author: Barbora Weinzettlová, Jiří Weinzettl
Location: Růžová 232, 374 01 Trhové Sviny (Czech Republic)
Project year: 2014
Completion year: 2021
Built-up Area: 340 sqm
Gross Floor Area: 317 sqm
Usable Floor Area: 288 sqm
Plot size: 500 sqm
Client: Barbora Weinzettlová and Jiří Weinzettl
Photographer: Alex Shoots Buildings www.alexshootsbuildings.com


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