13-04-2022

Waechter+Waechter: Archivo histórico de Colonia

Waechter+Waechter,

Brigida González,

Colonia, Alemania,

Arquitectura y Cultura,

Tras el trágico derrumbe de 2009, el Archivo histórico de Colonia ha inaugurado nueva sede. El proyecto, desarrollado por Waechter+Waechter y ganador de un concurso internacional, moderniza el concepto de lugar de conservación del patrimonio y abre en cambio sus puertas a la ciudad.



Waechter+Waechter: Archivo histórico de Colonia

Lo que hoy vemos a las puertas del centro histórico de Colonia es la última sede construida para acoger el Archivo histórico urbano, recién inaugurada y proyectada por el estudio Waechter+Waechter.
El 3 de marzo de 2009 el edificio situado en Severinstrasse, donde se alojaba el patrimonio del archivo municipal desde 1971, se derrumbó y con él otros dos edificios anexos, cobrándose desgraciadamente la vida de dos personas. Inmediatamente empezaron las operaciones para salvar cuanto fue posible de los numerosísimos materiales documentales sepultados bajo los escombros. Con el tiempo, sorprendentemente, aproximadamente el 95% del patrimonio se logró recuperar, aunque fue necesario limpiarlo, ordenarlo y colocarlo de nuevo en su contexto para que los estudiosos y el público pudieran de nuevo acceder a él. La ciudad necesitaba un edificio donde poder custodiarlo, por lo que en 2011 lanzó un concurso para construir la nueva sede en una zona distinta y situada mejor estratégicamente. En él participaron 40 estudios nacionales e internacionales, adjudicándoselo el proyecto de Waechter + Waechter Architekten de Darmstadt. El Archivo histórico de Colonia al que se incorporó el archivo fotográfico renano, inaugurado el 3 de septiembre de 2021, surge ahora en una bocacalle de la Luxemburger strasse, una de las arterias que desde el suroeste accede al centro urbano y que se encuentra cerca de la Universidad.
El objetivo del grupo de trabajo era transformar un episodio tan trágico de la historia de la urbe en una ocasión de modernización en muchos sentidos. La dirección que se tomó fue la opuesta a la que siempre había sido el concepto de base de una sede archivo, que la estructura anterior expresaba siendo bastante cerrada, con fachadas marcadas por aberturas diminutas, aislada de su contexto, una construcción que debía manifestar la necesidad de tutelar el documento histórico. La nueva obra da valor a la idea de apertura, de consulta y de saber compartido.
Lo interesante es que en el proyecto de Waechter + Waechter no es que la exigencia de tutela pase a segundo plano, sino que simplemente se traslada desde el punto de vista arquitectónico a un espacio secundario dedicado, alrededor del que se construyó un envoltorio de protección pero transparente, destinado también al intercambio, a la comunicación y a la interacción con la ciudad.
El edificio se articula en tres plantas más un sótano, y es un anillo acristalado donde se ubican las oficinas, los laboratorios de conservación y restauración de los documentos y las salas públicas de consulta. Dentro de este recinto regular, que constituye el rostro de la sede, pero también su “piel”, hay un patio con jardín dividido en dos por un segundo volumen compacto y cerrado que contiene los depósitos del patrimonio archivístico.

Aportan ritmo a las cuatro fachadas geométricas los parasoles de placas de bronce verticales y horizontales que adornan el rostro del edificio, dándole valor y ofreciendo un aspecto cambiante, que de esta forma se presenta muy diferente dependiendo de la perspectiva y del momento del día. Estas profundas aberturas trazadas sirven también para atenuar los rayos del sol en el interior, protegiendo los espacios de la luz solar directa y contribuyendo a cumplir de forma sostenible los elevados requisitos energéticos y de conservación del archivo.
La fachada de entrada por el noroeste, ligeramente retranqueada respecto a la Luxemburger Strasse, se presenta como una escenografía ordenada y rigurosa, perfecta para quedar con alguien o detenerse un rato, gracias a la plaza que se crea delante de la entrada. Sin embargo, gracias a las distintas plantas que en su interior se superponen, a la vista de las salas de lectura y del jardín interior, la imagen del edificio pierde dureza y asume toda la fuerza expresiva de un umbral, mostrando su deseo de proponerse como nueva puerta para la ciudad. Y es que nos encontramos en un punto neurálgico, entre el centro histórico y las afueras. El edificio surge teóricamente en los que sería la prolongación del cinturón verde que coincide con las antiguas murallas prusianas y que está planeado que en el futuro llegue a orillas del Reno. Idealmente el jardín interior del Archivo histórico se ha realizado para ser ya una continuación de aquél.
Al entrar los visitantes son acogidos en un vestíbulo, con la sala de conferencias a la vista y una escalinata que lleva a las plantas de arriba, donde están situados los espacios para la lectura y la consulta. Se alternan espacios abiertos pequeños y grandes, densidad y amplitud. La sala de exposición en la planta baja y la sala de lectura de la planta de arriba, revestidas en madera de abeto Douglas aceitado en blanco, crean un ambiente acogedor, luminoso y doméstico. Grandes mesas de lectura y una biblioteca de acceso libre garantizan el espacio para la concentración, mientras que las relaciones visivas contribuyen a crear una atmósfera de abertura y comunicación. La fachada de entrada es un espacio luminoso acristalado de dos niveles que permite entrever los espacios que están situados detrás, hasta el jardín.
Protegidos por estas fachadas sin ventanas, los documentos del Archivo histórico y de la Pinacoteca renana están conservados al seguro en estanterías y armarios. La disposición compacta de cada uno de los almacenes, así como la estructura maciza del edificio de hormigón, que posee una elevada inercia térmica, contribuyen a la estabilidad climática necesaria para una conservación permanente y segura de los archivos.
Gracias a las tuberías hidráulicas que discurren dentro de las paredes, los espacios de almacenaje se pueden enfriar o calentar en modo lento y uniforme. El espesor ideal de los materiales aislantes en las paredes exteriores y en la superficie del tejado para la termorregulación pasiva se calculó en fase de proyecto mediante simulaciones. El aporte térmico desfavorable de la luz solar queda reducido perfectamente por la estructura de la fachada de doble caparazón y retroventilada de las paredes exteriores.

Mara Corradi

Architects: Waechter + Waechter Architekten BDA https://www.waechter-architekten.de/
Client: City of Cologne
Gross surface area: 22,580m2
Useable surface area: 14,490m2 (including 9,035m2 of storage areas)
Historical Archive of Publications: 61,460 linear metres of shelving and 460 cabinets
Reading room: 30 seats for readers, 200 metres of bookshelves in the open-access library, 70 photo cabinets
Competition: 01 2011
Laying of the foundation stone: 2017
Completion: 2018
Opening: 2021
Photos by Brigida González


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